Desde este lunes vuelven a sus tareas miles de funcionarios públicos en todo el país. No obstante el gobierno extendió unos días más la obligatoriedad de hacerlo para poder preparar el retorno.
El decreto de no aglomeración, que implicaba sanciones, no continuará. El Gobierno no enviará al Parlamento una prórroga en ese sentido.
El objetivo es lograr que en una semana el Uruguay esté funcionando a pleno, con la vacunación avanzada y un retroceso en los casos, aunque con la incertidumbre de nuevas variantes del virus, que por el momento no implican volver atrás.
En el sector privado también la mayoría de las empresas han convocado a sus trabajadores para este y la semana entrante. Se espera a fines de julio una presencialidad totatal en todo el país.