Representantes de los 22 gremios que integran la Federación Médica del Interior (FEMI) se reunieron en Maldonado con motivo de una asamblea anual que tuvo al departamento como anfitrión. En ese marco, expresaron su preocupación por la necesidad de profesionales que se radiquen en las localidades alejadas de las capitales.
Así lo afirmó el presidente de FEMI, Daniel Ayala, quien participó de una ronda de encuentros con los principales actores de la salud del departamento de Maldonado, junto a varios integrantes del Comité Ejecutivo y representantes de la Unión Médica de Maldonado.
Se trata de una iniciativa denominada «FEMI en su lugar» que apunta a conocer la realidad de cada departamento y «cuáles son las carencias o necesidades de las ciudades del interior del país», detalló Ayala.
La ronda de encuentros comenzó el pasado jueves 26 de mayo en el Hospital de San Carlos y continuó en la Dirección Departamental de Salud. Posteriormente, hubo un encuentro de trabajo en el Complejo Hospitalario Maldonado-San Carlos.
En esa línea, durante los días posteriores se prosiguió con reuniones junto a la Dirección General de Servicios Médicos de la Intendencia de Maldonado, laRed de Atención Primaria (RAP) y con el sector privado.
Ayala destacó que «está claro que nuestro interior es muy diverso y que tenemos tantas realidades distintas como comunidades, pueblos y parajes». Sin embargo, «queda claro que hay una falencia transversal y es el problema de la falta de médicos en el interior».
Desde el gremio, se hizo hincapié en «el enorme desafío de trabajar para lograr que esta realidad cambie y que cuando un médico se traslada a una localidad con su familia, no tenga la necesidad o el deseo de irse del lugar».
En lo que va del año 2022, el programa «FEMI en su lugar» ya ha recorrido Salto, Artigas, Tacuarembó, Soriano y Rivera.
Por su parte, la presidenta de la Unión Médica de Maldonado, Ana Vernengo, afirmó «el compromiso de todo el sector en conocer la realidad del área médica en el departamento, así como colocar en agenda la situación para trabajar en la mejora no solo de la radicación sino de las condiciones y herramientas con las que cuentan los colegas».
Agregó que «es nuestro deber propiciar planes de trabajo y de acción para abatir las dificultades». Dentro de la planificación estratégica «apuntamos a la formación y continua capacitación», así como a brindar las garantías necesarias para el sector, tanto en el área pública como privada, donde el médico y ser humano estén en primer lugar y permita un correcto desarrollo profesional y humano».