Así calificó el intendente Enrique Antía la entrega de las 16 viviendas que son parte del proceso de realojo de 530 familias del asentamiento que avanza en forma progresiva.
El jefe comunal entregó las llaves de tres de las 16 que irán entregándose a medida que se van demoliendo sus viejas casas en el asentamiento en estos días.
Antia dijo que se trata de un viejo sueño que permite la creación de un barrio de calidad para dejar atrás el asentamiento.
Resaltó la importancia de convencer a los vecinos que es un lugar para vivir mejor y desarrollarse. Asimismo contó a los presentes el proceso que hoy lleva a qué más del 98 porciento de los vecinos avalen el realojo. Señaló que en dos años y medio estará finalizado el realojo.
Recordó que dónde hoy se construyen las viviendas era un espacio comprado por extranjeros que la intendencia expropió para poder concretar el sueño de un barrio con todos los servicios para las familias.
En ese sentido destacó la policlínica, espacios públicos, bicisendas, entre otros. El realojo es posible gracias a la inversión de 55 millones de dólares pagaderos a 15 años con el aval del gobierno nacional.
Sobre la continuidad del realojo el intendente indicó que están ya licitadas las empresas para la construcción gradual de 120, 240 y 38 viviendas más que comenzarán en los próximos días. Auguró que a diciembre de 2023 el objeto es realojar 300 familias más.
Solución para evitar nuevos asentamientos:
El intendente también dijo que la solución para los asentamientos va de la mano de evitar nuevos, motivo por el cual rige desde su anterior periodo un plan de compra de tierras, fraccionamiento de las mismas y puestas a la venta para familias de Maldonado a precios accesibles, sorteo mediante.
Entre 2015 y 2020 se sortearon 430 terrenos y en el actual se compraron 45 hectáreas más para fraccionar y poner a la venta, cerrando así el círculo.
El acto contó con la presencia de autoridades nacionales y departamentales.