Los titulares de la Agencia Nacional de Vivienda, Klaus Mill; el Banco de Seguros del Estado, José Amorín Batlle, y el Banco Hipotecario del Uruguay, Casilda Echevarría, participaron este martes del desayuno de trabajo organizado por la Asociación de Dirigentes de Marketing del Uruguay (ADM).
Mill recordó que la ley n.° 18.795, del 12 de setiembre de 2011, otorgó beneficios tributarios para construir viviendas de interés social y promovió la inversión privada en edificación, refacción o ampliación de casas para venta o alquiler, con el objetivo de impulsar la renovación de stock y la regeneración urbana, mediante la supervisión de la calidad y el desarrollo de proyectos viables desde el punto de vista arquitectónico y económico-financiero. Esto derivo en el aumento de los proyectos desde 2020, que prevén finalizar este año con 200 ingresos y un leve descenso en los precios. La ANV escriturará, en 2024, uno de los complejos más grandes de Montevideo, donde viven 1.200 familias, ubicado en la intersección de las calles Millán y Lecocq.
Por su parte, Casilda Echeverría titular del directorio del BHU repasó la historia de los créditos en unidades reajustables (UR) e indexadas (UI) que brinda el banco. Señaló que la institución lidera el otorgamiento de créditos hipotecarios, es sólida, goza de buena rentabilidad, su patrimonio es 10 veces mayor que lo que exige el Banco Central del Uruguay y la morosidad es muy baja, más aún en UI.
Amorín Batlle, presidente del BSE, valoró el crecimiento del BSE en los últimos 20 años, de 475 millones de dólares de facturación en 2010 1.400 millones en 2022, y agregó que se prevé que la cifra llegue a 2.600 millones de dólares para fines de 2023.