De todos modos debió intervenir la Brigada de Explosivos del Ejército Nacional que destruyeron la caja con agua a presión lanzada desde cañones a distancia.
Según confirmó la Policía a Informativo Uruguay de Radio Uruguay, el artefacto tenía «un tester con pilas y cables desconectados sin ningún elemento que pudiera explotar».
Sobre las 10:20 de la mañana, la situación generó conmoción en la zona de Médanos de Solymar en el km 27 de avenida Giannattasio cuando un sujeto llegó en bicicleta al local de pagos y le dijo a la cajera que no tocara el botón de pánico.
La mujer lo expulsó del lugar e inmediatamente el sujeto dijo «te dejo esto», depositando una caja en el mostrador y partiendo rápidamente.
Se está realizando una investigación mediante cámaras para dar con el paradero del hombre, sin rastros por el momento.