El episodio del colectivo que atravesó plena rambla de Pocitos, rompió el muro, la duna y terminó en el agua, sigue siendo un misterio en cuanto a sus reales motivos por los cuales ocurrió.
El chofer ya está fuera del CTI y declaró no recordar nada hasta que despertó en el centro asistencia a donde fue trasladado.
No obstante, la fiscalía penal dispuso custodia para evitar cualquier posible fuga.
La situación se agravó al fallecer una pasajera de 55 años a la que iban a tener que amputarle una pierna debido a las lesiones sufridas.
Su familia ya inició acciones penales contra el chofer y la empresa CUTCSA. En tanto en las próximas horas declaran pasajeros que hablaron con el chofer antes de el que 121 terminara en la playa.
Se trata de las dos personas que se ven en los videos que circularon por las redes. Intentaron que frenara el vehículo, pero, al no conseguirlo, retornaron al fondo del ómnibus.