En una fuerte apuesta para el desarrollo de la zona el jefe comunal dijo que son necesarias alternativas al sol y playa, y los espacios públicos son clave.
Señaló que Piriápolis es uno de los dos motores fuertes que tiene el departamento y le faltaba un lugar para encontrarse.
Aseguro que en el parque La Cascada lo que había antes daba vergüenza ajena y no podía dejar el gobierno sin este espacio.
La primera fase quedó inaugurada hoy y el resto en junio y se trata de un parque con 14 parrilleros, entretenimientos para la familia, juegos, paseos, en definitiva un lugar de encanto que necesitaba el balneario.
Dijo que el parque era parte del corazón y disfrute de Piriápolis y que va a ser otro, porque anteriormente estaba destruido, y había sido vandalizado.
El parque, que va a ser gratuito, va a tener cerramientos y control para evitar vandalizaciones cómo era la costumbre.

La experiencia de haber realizado la recuperación de El Jaguel, Mancebo y el Indígena, permitió avanzar en un parque de calidad y lugar de encuentro de la familia. No hay nada mejor que invertir en espacios públicos y el disfrute de la familia, expresó.
Dijo que en semana de turismo los parques colapsaron y antes no había ni hamacas, pero hoy están cuidados los juegos y posibilidad de disfrute.
En lo que tiene que ver con el reptilario, Antía dijo que era un sueño de la familia que lleva adelante Alternatus tener un lugar para trabajar y aportar al desarrollo de Piriápolis.
Dijo que antes lo hacían en condiciones muy difíciles y peleando la diaria. Necesitaban un apoyo del gobierno porque solos no iban a llegar.
Fue así, relató Antía, que se construyó algo a la medida de lo que se precisaba. “Valió la pena. Es una inversión para el desarrollo” dijo.
Indicó que al Alternatus lo llaman de muchos departamentos del país y se genera desde allí, trabajo para todos.
El intendente concluyó señalando que esto, que podría definir como una asociación público-privado, va a ser una motivación para que otros emprendedores sepan que con el respaldo de la IDM se puede ir a más.
El parque demandó una inversión de 3.5 millones de dólares y 500 mil más el reptilario donde se trabajó junto a Alternatus.
En tanto el Director general de Gestión Ambiental, Jorge Píriz destacó que las obras son parte del plan de remodelación de espacios públicos que se pensó para todos los parques que se encontraron en un deplorable estado hace 10 años.
Destacó la recuperación del anfiteatro, el pórtico del estacionamiento, una plaza de comidas y parrilleros techados y otros al aire libre. La política de recuperación de espacios públicos fue prioridad en esta última etapa de gobierno, señaló el jerarca.
En tanto Mauricio Tejera dió detalles técnicos de ambas obras. Sobre el reptilario el director de obras civiles dijo que tiene 450 metros cuadrados y será equipada por quienes están gestionando Alternatus. Es un edificio que tiene un mayor nivel de aislamiento y espacios grandes.
Sobre el Parque la Cascada dijo que es para Piriápolis un pulmón y había entrado en decadencia, algo que hoy se recuperó y se plantaron 500 árboles y 3.000 plantas. Se cuidaron las especies de árboles, cañadas de agua, entre otros.
Desde Alternatus, Irasema Bisaiz explicó que implica para ellos un nuevo modelo de trabajo donde incorporarán sectores de investigación también, destacando el trabajo con la IDM y la sintonía para adecuar el lugar al trabajo diario.
Calificó el edificio como maravilla y señaló que hoy alberga 200 animales de 35 especies distintas.
Apuestan a incorporar conceptos de conservación, cuales son sus amenazas que ponen en riesgo estas especies y tratar de ayudar a cambiar acciones para una convivencia amigable.








