En las últimas horas se realizó una reunión en Pan de Azúcar entre autoridades de Primaria, representantes de la comunidad educativa y padres de alumnos donde se abordó la situación del niño de 9 años que el pasado viernes 2 de agosto asistió a la Escuela Nº 6 con un cuchillo. El menor había advertido el día anterior que “mataría a las maestras y a tres compañeros”.
Tras la reunión, se decidió que el niño seguirá asistiendo a la misma escuela, pero será cambiado de turno. La medida fue considerada como insuficiente por la mayoría de los padres de la institución, quienes consideran que el menor debería ser trasladado a un centro “donde esté más contenido y con maestros preparados”.
La abuela del niño, presente en el encuentro, defendió la resolución afirmando que su nieto “va a seguir asistiendo a la escuela como es su derecho”, además de continuar con actividades como ir a la piscina, educación física y recibir apoyo psicológico. Explicó que no ha recibido quejas del entorno, excepto del ámbito educativo.
En contraste, una madre señaló que muchos padres no están conformes con la decisión y están evaluando no enviar a sus hijos a clase.
Consultado por Portada, el director del INAU, Eduardo Rodas, señaló que técnicos de la institución y de Primaria están trabajando en el abordaje psicológico y del entorno del niño, y no se descarta una intervención en materia de salud mental. Rodas enfatizó que, más allá del incidente en la escuela, “se deben evaluar otros factores que rodean al menor y evitar su exposición”.
