El 15 de enero J.N.L.G., de 28 años, quien se encontraba cumpliendo su comisión laboral dentro de la Unidad N.º 17, le solicitó a uno de los funcionarios policiales permiso para ir al baño. Al verlo en una actitud sospechosa, el efectivo le solicitó que abra el termo que estaba utilizando.
En su interior encontró dos envoltorios con 10,5 gramos de marihuana. Se dio parte a Fiscalía, a la Brigada Antidrogas de Lavalleja y a la Policía Científica que realizó el relevamiento de la incautación.
El 24 de enero se llevó adelante la audiencia en la que el Juzgado Letrado de Primera Instancia de Lavalleja de Primer Turno condenó por este hecho a J.N.L.G. a 17 meses de prisión efectiva por un delito de acto preparatorio de suministro de sustancia estupefaciente prohibida por la ley especialmente agravado, pena que cumplirá luego de que finalicé el tiempo de privación de libertad que está cumpliendo actualmente por un delito de rapiña especialmente agravada por el uso de armas y un delito de porte de armas reincidente con vencimiento previsto para mayo de 2023.
Por otro lado, el 31 de diciembre, mientras se realizaban los controles de rutina a las visitas que estaban ingresando al establecimiento, se detectó que D.E.A.G. llevaba un elemento extraño en su vagina. Al consultarla al respecto, la mujer accedió a extraerlo y entregar el envoltorio que resultó ser marihuana con un peso de 19,14 gramos. Se dio parte a Fiscalía, Policía Científica y a la Brigada Antidrogas de Lavalleja.
EL 1º de enero el Juzgado Letrado de 1era. Instancia de Lavalleja de 4to. Turno condenó a D.E.A.G. como autora penalmente responsable de la comisión del delito de tráfico ilícito de estupefacientes en su modalidad de suministro agravado en grado de tentativa y en calidad de autora a la pena de 2 años y 2 meses de penitenciaria a cumplirse de forma efectiva.
Estas dos incautaciones se suman a las realizadas, también en enero, a un hombre que intentó ingresar marihuana en un reloj, una pala y una escoba.
La directora de la Unidad N.º 17, María Julia Arnaldo, destacó el trabajo que realizan los funcionarios en la revisoría, ya que el establecimiento no cuenta con escaner corporal ni de bultos.