El ex Canciller, que no realizó declaraciones ante Fiscalía, concurrió junto a su abogado Gonzalo Fernández y entregó una nota a la prensa a la salida.
Allí asegura que el intercambio de mensajes entre el subsecretario Guillermo Maciel y Carolina Ache son comunicaciones privadas y no constituyen documentación oficial.
De su contenido, sostiene, tomó conocimiento horas antes de la interpelación donde dispuso una investigación administrativa.
Indicó que luego que le fuera solicitado, en esa investigación, los chats a la entonces subsecretaria, ella se negó en dos oportunidades.
En la tercera la convocó a su despacho y junto a su abogado, el ex fiscal de Corte, Jorge Díaz la cuestionaron y le atribuyeron un “ánimo pesquisante”.
Asegura que el diálogo difundido en audios que dio a conocer el semanario Búsqueda fueron descontextualizados.
“Le dije figuradamente que perdiera el teléfono en la conversación que ella subrepticiamente grabó, aislando y descontextualizando lo que venía sucediendo”.
Dejó sentado que cuando se expidió el pasaporte a Marset era Ache quien estaba ejerciendo como Ministra dado que él se encontraba en misión oficial.
La carta finaliza señalando que no tuvo participación alguna, ni siquiera conocimiento de la tramitación del pasaporte de Marset, por lo que no faltó a la verdad en el Parlamento.