El alarmante incremento de los casos y las muertes por COVID-19 en Brasil indica que la variante P1 del coronavirus, que predomina actualmente en ese país, tiene mayor capacidad de transmisión, además de que podría ser más resistente a la inmunidad natural que tienen las personas cuando ya han padecido la enfermedad.
“Quiero subrayar que la situación brasileña es muy grave y estamos muy preocupados. Brasil debe tomar medidas agresivas de salud pública mientras despliega las vacunas en todo su territorio”, dijo el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En la rueda de prensa bisemanal sobre la emergencia, el doctor Tedros Adhanon Gebreyesus sonó la alarma sobre el número de casos y muertes al alza en Brasil y advirtió que si las autoridades del país no adoptan provisiones para prevenir la transmisión o suprimir el virus, la tendencia no cambiará.
Tedros recordó además, que la situación de Brasil tiene un impacto enorme en todos los países vecinos, “en América Latina y más allá de la región”.
Por su parte, el director de Emergencia de la OMS, explicó que el incremento de los casos en las zonas de Manaus y Amazonas, que habían tenido recientemente brotes intensos, significa que la P1 es una variante con muchas mutaciones específicas que facilitan su transmisión y que, además, podría ser más resistente puesto que numerosos casos serían reinfecciones.
Según los datos de la OMS, Brasil ha registrado hasta ahora casi 10,8 millones de casos y 260.000 muertes. En Manaus y Amazonas la ocupación de las Unidades de Cuidados Intensivos es de un 80% y las camas ocupadas por COVID-19 alcanzan el 60%, pese a que los contagios empiezan a reducirse.