Su presidente, Marcelo Abdala afirmó que esos tiempos de lucha serán para que no prospere una ley de reforma jubilatoria que trae pérdidas de derechos y plantea que debemos trabajar más para cobrar menos.
Agregó que será un año de defensa de los intereses de los trabajadores, de una intensa movilización en defensa de la educación, de los Consejos de Salarios, entre otros.
A la hora de repasar el año, y en diálogo con el portal de la central obrera, Abdala calificó a 2022 como clave para el desarrollo de un proceso de luchas importantes.
“Se podría decir que construimos la paridad de fuerzas con el referéndum para anular 135 artículos de la Ley de Urgente Consideración (LUC). Esta fue una iniciativa del movimiento obrero y tuvo el respaldo de prácticamente la mitad de la población. Si bien no alcanzaron los votos para anular los 135 artículos, ese hecho jugó como eslabón táctico central del cambio del activismo y del estado de ánimo de la organización popular”, sostuvo.
Además recordó la conmemoración del 1º de mayo, la movilización del 7 de julio que fue preparada con acciones de todos los medios, el paro general en setiembre, así como las movilizaciones en octubre y recientemente, el 15 de noviembre, en defensa de la seguridad social.
Indicó que el año que se va se caracterizó por cambios regresivos como son las modificaciones de la ley de negociación colectiva, el proyecto de personería jurídica, la privatización de las empresas públicas, el Proyecto Neptuno, el proyecto de privatizaciones en ANCAP, la entrega de ANTEL, la reforma jubilatoria, entre otras.