Cuando se presentó en 2005 se enfrentó en soledad al entonces intendente Enrique Antía. En esa oportunidad logró la victoria por 1.600 votos.
Recuerda que esperó el resultado en la casa de un amigo, en Pueblo Gerona, donde él nació y lo hizo mirando una televisión blanco y negro junto a su compañera, sus hijos y un reducido grupo del comando electoral.
5 años más tarde logró la reelección por un 52% de los votos y su nombre comenzó a sonar a nivel nacional como un referente o una cara de la renovación que reclamaba el Frente Amplio.
Para De los Santos ganar y ser el primer dirigente de izquierda en llegar al gobierno de Maldonado “fue un gran desafío” que no pudo disfrutar al 100% porque nunca “tuvo tiempo de festejar los logros” como él mismo admite.
“Fue un trabajo muy arduo. En muchos momentos pasé muy mal por parte de acciones de la oposición, como el juicio político en el senado, las preguntas constantes de la prensa sobre la situación de Satenil… cuando repaso lo que viví me dan ganas de quedarme abrazado a mi nieta al calor del fuego”, señala.
Sin embargo, no duda en defender que el Frente Amplio hizo “una gran transformación en Maldonado abordando temas como políticas sociales inclusivas, turismo, infraestructura, un plan de ordenamiento, temas ambientales, situación del agua y el convencimiento que hay derechos y obligaciones”.
Hoy asegura que no alcanza con construir obras si no se logra una política de igualdad de derechos.
Luego de sus años en el gobierno vendrían los momentos adversos que lo dejarían fuera del parlamento y al Frente Amplio fuera de los gobiernos nacional y departamental, algo en lo que aún hoy, admite sentir responsabilidad por ello.
“No hice todo lo que tenía que hacer para que ganara el Frente Amplio… lo siento en el alma”
No se perdona no haber generado más instancias de reuniones con vecinos para bajar la gestión al territorio, pero no comparte que en 2015, cuando el candidato era Darío Pérez, la campaña le haya sido esquiva.
Señala que estuvo en todos lados, pero no en la foto y que nunca le dieron un escenario para hablar los que lo criticaron luego. “Falté 5 o 6 días” que fue cuando recorrió otros departamentos donde había compañeros que se lo requerían.
Para él, el Frente Amplio está en condiciones de ganar, pero para ello deberá volver a enamorar. No ve posible ese triunfo sin el interior del país como motor, dado que deberá tener un peso gravitante en la toma de decisiones.
No duda en afirmar que si el Frente Amplio gana Maldonado, hay un sector que se ha visto beneficiado hasta ahora, que va a tener que aportar más con fines solidarios, para que otros tengan derechos.
A nivel nacional es crítico con el gobierno de Luis Lacalle Pou y no duda en tacharlo de Herrerista, con todo lo que para él eso simboliza.
“Es un gobierno que apostó a bajar el déficit, que hoy sigue siendo el mismo, pero en el cual los trabajadores han perdido 34 jornales, hubo caída del salario, perdida del poder adquisitivo de jubilados, creció el endeudamiento y se favoreció a los maya oro”.
También le imputa el aumento de la pobreza infantil, la falta de medicamentos y el alejamiento en materia de vivienda, haciendo que en Maldonado el realojo del Kenndy se haya dado por el endeudamiento de la IDM en solucionarlo.
Señala que la inversión en obra pública también ha estado ausente y puso el ejemplo del Puente 2 de la Barra, en el cual fue la IDM la que invirtió para salvarlo y recuperarlo.
Califica al gobierno de Lacalle Pou como un gobierno “sacudido por hechos de corrupción y de los sectores del poder donde se desfavoreció las clases medias, algo que caracteriza al Herrerismo”.
Con respecto a Maldonado indica que hubo un retroceso, dado que el Partido Nacional no utiliza el concurso o el sorteo para generar ingresos a la administración sino que se ha constatado que entran a dedo a pesar de haber llamados públicos y eso degrada el valor de la institución.
Señaló que el actual jefe comunal duplicó el déficit e hipotecó a los próximos gobiernos.
No obstante, le reconoce al jefe comunal una gran inversión en espacios públicos, señalando que el Jagüel “está maravilloso” y también el nivel de limpieza en las calles, afirmando que “en la izquierda nos cuesta la estética”.
Sobre la sucesión de Enrique Antía, De los Santos afirma que no ve candidatos fuertes y opinó que si lo definen en la convención van a defraudar a mucha gente.
Asegura que ser candidato a intendente dependerá de si el FA gana la elección nacional y a nivel departamental son la primera fuerza en Maldonado.
Sin embargo, señala; “Me cuesta decir que tengo dudas, seguramente termine aceptando dar todas las batallas, pero pienso en el momento del retiro también, tendría que ir con 63 años y no puedo pregonar la renovación si voy con esa edad”
No se considera líder pero sí un referente y asegura que hay gente que se sentiría entusiasmada de militar si él está.
Pintor, obrero, ex secretario general del SUNCA, nacido en Gerona donde confiesa “faltaba mucho, pero éramos felices, y desde el año 1986 habitante de San Carlos, en una casa que él mismo reformó, donde vive con su compañera y disfruta de su nieta, “el flaco” como es apodado, continúa dándose tiempo para pescar, una de sus grandes pasiones, y para disfrutar de la familia, algo que atesora al igual que los amigos.
No oculta la emoción al hablar de su nieta, de la cual confiesa “ha sido una inyección de vida”.
Desde su hogar medita por estas horas si dará la batalla electoral, algo que genera expectativa en propios y extraños.
Oscar de los Santos es el protagonista de un nuevo Retrato Hablado de Grupo Portada.