La iniciativa anunciada por el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Juan Castillo, y confirmada por el subsecretario de la cartera, Hugo Barreto, surge como respuesta a la preocupación por la forma “de un minuto para el otro” en que algunas compañías han comunicado despidos en los últimos tiempos, incluso mediante “estados en redes sociales”.
El objetivo central, explicó el jerarca, es “contar con un plazo que permita a las autoridades y a los sindicatos explorar alternativas antes de que las decisiones empresariales se concreten”.
Castillo señaló que el proyecto se basará en convenios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que exigen notificación previa. Subrayó que “la anticipación es clave”, ya que una comunicación formal permite al gobierno actuar como “mediador, facilitar el diálogo o procurar nuevos inversores, algo que cuesta muchísimo tiempo más que el propio cierre”.
El secretario de Estado remarcó que “la moda que se ha instalado en los últimos tiempos ha llevado a que incluso se comunique por estado en redes sociales o videos”.
Recordó que “este año empezó con la retirada del país de Yazaki, que dejó 1.200 trabajadores sin empleo de la noche a la mañana”, lo que genera “dificultades y preocupación al Ejecutivo”.
Insistió en “la necesidad de recurrir a un convenio internacional que hable sobre el anticipo”, reiterando que la decisión de un despido colectivo “se tiene que anunciar previamente, a los efectos de tomar medidas” por parte del gobierno.
“Si el gobierno tiene información, lo primero que hace es comunicar a las partes, tratar de reunirse. Si los problemas por los que una empresa se retira o cierra tienen una alternativa, nosotros estamos dispuestos a encontrarla. Despedir o cerrar una empresa es de un minuto para el otro. Buscar nuevos inversores o tratar de abrir una nueva industria a veces cuesta muchísimo tiempo más y esa es una parte que también preocupa”, dijo.
Por su parte, el subsecretario del MTSS, Hugo Barreto, sostuvo que Uruguay aún tiene “una asignatura pendiente” en materia de regulación de los procedimientos de terminación de la relación laboral. Recordó que la tradición nacional es la del llamado “despido libre”, donde las empresas pueden finalizar la relación de trabajo sin previo aviso y sin justificación.
Según Barreto, esta situación, que “debería haber ameritado una solución en su momento, se ve agravada por hechos recientes”. Mencionó los despidos colectivos del año pasado en una empresa de reparto, anunciado a través de redes sociales; y el retiro de la autopartista Yazaki concretado sin ningún procedimiento previo y en base exclusivamente a la voluntad unilateral del empleador”.





























































